Esta es una lista de “best seller”, de los 10 libros de ensayo y filosofía, actuales pero también de todas las épocas, que más se han vendido en el último año. Para hacerla hemos contactado con aquellos por cuyas manos pasan al recibirlos, colocarlos, envolverlos… y dárselos al lector. Catorce librerías de España, México, Colombia y Argentina han contestado a nuestra pregunta: ¿cuáles son los libros de pensamiento más vendidos en el último año?
Por Pilar G. Rodríguez
1 La sociedad del cansancio, de Byung-Chul Han (Herder). Lo del pensador coreano ha sido nombrado por varias librerías como “fenómeno editorial” de la temporada, más allá de un título en particular. “Ha causado muchísimo interés”, decía Luis Domínguez, responsable de la librería Marcial Pons, de Madrid (España). La sociedad del cansancio es el título que más se repetía, pero también los libreros mencionaron otros como La expulsión de lo distinto o Psicopolítica. Más allá de un libro en particular, interesa saber lo que piensa este filósofo afincado en Berlín, ya que sus diagnósticos, materializados en forma de títulos, parecen esclarecedores. “La gente entra a buscar al coreano de moda. ¡Y a veces lo expresa así!”, señala, desde la librería argentina Céspedes en Buenos Aires, la librera Cecilia Fanti. Por cierto, Han acaba de sacar un nuevo título al mercado: Buen entretenimiento, en Herder, su sello habitual.
2 La penúltima bondad: ensayo sobre la vida humana, de Josep María Esquirol (Acantilado). Y no solo este título. Como en el caso de Byung-Chul Han, el libro anterior de este profesor de filosofía de la Universidad de Barcelona, experto en pensamiento contemporáneo, La resistencia íntima, también se vendió de maravilla… Y se sigue vendiendo. Ambas obras tienen mucha relación. Forman una especie de binomio: la primera se refiere a la condición humana y la segunda a la vida humana, según explicaba el propio Esquirol en entrevista con Ignacio Vida-Folch en El País. Y ¿qué es lo esencial en la vida humana? En este ensayo la tesis es que los «infinitivos esenciales» del ser humano son tres: vivir, pensar y amar.
3 Sapiens. De animales a dioses, de Yuval Noah Harari (Debate). Junto al título y al subtítulo, en la portada de este libro también se lee Breve historia de la humanidad… ¿a quién podría no interesarle? El historiador Yuval Noah Harari parece haber dado con la tecla y sus libros son superventas en todo el mundo. En Sapiens Harari echa la vista atrás para –combinando biología e historia– explorar lo que ha definido al ser humano. Hace 70.000 años, al menos seis especies de humanos habitaban la Tierra. Hoy solo queda una, la nuestra: Homo Sapiens. ¿Cómo logró nuestra especie imponerse en la lucha por la existencia? ¿Por qué nuestros ancestros recolectores se unieron en comunidades? ¿Cómo llegamos a creer en dioses, en naciones o en los derechos humanos; a confiar en el dinero, en las leyes? ¿Cómo acabamos sometidos a la burocracia, a los horarios y al consumismo? ¿Y cómo será el mundo en los milenios venideros? Bueno este último, centrado en el presente, lo dejó más bien para el siguiente título. Lo acaba de publicar y se titula 21 lecciones para el siglo XXI.
4 En defensa de la ilustración, de Steven Pinker (Paidós). El famoso científico e intelectual Steven Pinker expone en este libro las razones por las que es necesario, quizá más que nunca, no dar por supuesto los valores, ideas e ideales que partieron de la época de la Ilustración y han conformado el mundo actual. La ciencia, el progreso, el humanismo y la confianza en la razón han hecho al mundo todo lo bueno que pueda ser. En esta evaluación, Pinker insta a ver con otra perspectiva los titulares alarmistas: los datos apuntan a que la vida, la salud, la prosperidad, la seguridad, la paz, el conocimiento y la felicidad van en aumento, no solo en Occidente, sino en todo el mundo. ¿Razón? La Ilustración. Una advertencia a los descendientes intelectuales de Nietzsche, Schopenhauer, Heidegger, Adorno, Marcuse y demás profetas de la fatalidad.
5 Eichmann en Jerusalén, de Hannah Arendt (Debolsillo). El primer clásico del ranking es un clásico… contemporáneo. Las reflexiones de Arendt y su concepto de la banalidad del mal han impregnado toda la reflexión y la reflexión política del siglo pasado. Surgió de un trabajo periodístico, cuando en la primavera de 1961, en Israel, con Eichmann sentado ante el juez, estaba Hannah Arendt siguiendo el proceso como corresponsal de la revista estadounidense The New Yorker. Adolf Eichmann, el “arquitecto del holocausto”, el nazi que favoreció, propició y permitió la muerte y el sufrimiento atroz de millones de personas, sacudió al mundo con su declaración de que no se sentía culpable ni responsable de semejante horror. Él se veía a sí mismo inocente y así se declaró. Hacía su trabajo. Nada más. Luego Arendt sacudió al mundo con su expresión y con su reflexión sobre el papel de la responsabilidad individual.
6 Biografía del silencio, de Pablo D’Ors (Siruela). En el primer párrafo de este libro breve (de hecho Breve ensayo sobre la meditación es el subtítulo) ya caen, en modo casual, unas cuantas verdades sobre la meditación que en otros textos resultan lejanas o farragosas. La importancia de la posición, el objetivo –definido hermosamente como “reconciliar al hombre con lo que es”– o la consecuencia –“enseguida comprendí que se trataba de aceptar con buen talante lo que viniera, fuera lo que fuese”– se suceden sin artificio, de una forma que se percibe como verdadera. Es el logro de este sacerdote promotor de la práctica de la meditación, un ejercicio que nos devuelve a casa y hace posible el encuentro y el conocimiento de nosotros mismos.
7 El segundo sexo, de Simone de Beauvoir (Cátedra). El auge del feminismo ha hecho volver los ojos a las pioneras de la corriente y allí se encontraba este clásico de Simone de Beauvoir. Un libro cuyas frases han pasado a ser reivindicaciones para las nuevas corrientes feministas. Sobre el texto originario, escribía Sarah Bakewell en En el café de los existencialistas (Ariel): “Podría haberse establecido en el canon como una de las mayores reevaluaciones culturales de los tiempos modernos, un libro para colocar junto a las obras de Charles Darwin (que resituó a los humanos en relación con otros animales), Karl Marx (que resituó la alta cultura con relación a la economía) y Sigmund Freud (que resituó la mente consciente en relación con lo inconsciente). Beauvoir evaluó las vidas humanas de nuevo demostrando que somos seres profundamente marcados por el género”.
8 La filosofía en 11 frases, de Darío Sztajnszrajber (Paidós en Argentina; en España lo publicará Ariel). “Frases. Frases filosóficas. Textos diseccionados que en su quebranto fabrican un lugar común”. ¿Quién no conoce o ha echado mano del “pienso luego existo” o se ha acordado de Nietzsche con ocasión de su “Dios ha muerto”? Hay frases de filósofo que han pasado a formar parte los rincones menos filosóficos que puedan darse. Y no. Este filósofo argentino se ha paseado por esos lugares y ha rescatado estas expresiones inyectándoles nueva dosis de sentido para uso y disfrute de un público general, sin perder su esencia filosófica.
9 Nueva ilustración radical, de Marina Garcés (Anagrama). El segundo título de esta lista dedicado a la Ilustración pone de manifiesto una cosa: ese periodo puede servir de inspiración o guía a la hora de analizar y sobrellevar las turbulencias del presente. Desde una óptica distinta a la de Pinker, Marina Garcés da cuenta de la poderosa reacción antiilustrada que domina el relato del presente. Ante la actual crisis de civilización, solo parece haber dos salidas: o condena o salvación. Y pone el dedo en la llaga: lo que esconde esta disyuntiva es una rendición voluntaria, una renuncia a la libertad, es decir, a la posibilidad de mejorar, juntos, nuestras condiciones de vida. ¿Por qué nos creemos estos relatos apocalípticos? Este libro apuesta por una nueva ilustración radical en combate contra las credulidades de nuestro tiempo.
10 El hombre en busca de sentido, de Viktor Frankl (Herder). El relato de la experiencia del psiquiatra austriaco Viktor Frankl en los campos de concentración nazis no solo es una ayuda inestimable a la ahora de conocer lo que pasó, el mundo del que somos herederos, sino que continúa siendo una herramienta de primera a la hora de saber quiénes somos nosotros. En aquella experiencia límite, quien fuera despojado de absolutamente todo, salvo de la propia existencia, encontró palabras para recordarse a sí mismo –y quienes vendrían– que la dignidad nadie la otorga ni la quita, sino que viene de dentro; que la libertad interior es indestructible y que si se conservan una y otra, incluso en las circunstancias más penosas y adversas, la vida merece la pena. En eso consiste la logoterapia, método psicoterapéutico creado por el propio Frankl, centrado precisamente en el sentido de la existencia y en la búsqueda de ese sentido por el ser humano.
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Las librerías que han participado…
Nuestro muy especial agradecimiento a los responsables de las librerías españolas Cámara, en Bilbao; Marcial Pons y Pasajes en Madrid; La puerta de Tannhäuser, en Plasencia (Cáceres); Yerma, en Sevilla; Lagun, en San Sebastián; Laie y Alibri, en Barcelona; Cervantes, en Oviedo; y Viridiana, en Valencia.
Desde América nos han ayudado las librerías Siglo del Hombre, de Bogotá (Colombia); Libros del Pasaje y Céspedes, en Buenos Aires (Argentina); y finalmente la Librería Herder, en Ciudad de México.
… y lo que los libreros nos han contado
Con las listas de las librerías anteriormente mencionadas hemos elaborado este ranking, pero los libreros nos han contado muchas cosas más. ¿No es eso lo que uno espera cuando se acerca a una librería especializada? (Por cierto, en este caso, esos “libreros” a los que nos referimos con el masculino en funciones de genérico son mayoritariamente libreras). Nos han contado cosas tan interesantes como la que explican desde Sevilla los responsables de Yerma, muy fanes del público “filosofer”, como lo denominan. Resulta que esa librería está al lado de la facultad y “es un gusto recibir personas interesadas en la disciplina, puesto que se nota claramente que es un perfil diferente. Se distingue el interés y cuidado por el libro y de su mundo, así como el ritmo y la paciencia que muestran a la hora de visitarnos. Es algo que echamos en falta, en muchas ocasiones, en estudiantes de otras materias o en el público en general. Como siempre, hay de todo, pero, sin duda, el público ‘filosofer’ cuenta con este sello distintivo”.
Respecto al “ganador” del ranking, Sandra T. Florencia, de la librería (y editorial) Herder en Ciudad de México, le bajaba los humos al coreano Byung-Chul Han y señalaba la alegría que es para ellos que “autoras publicadas por nuestra propia editorial se
encuentren compitiendo directamente con libros de un autor fenómeno como el filósofo Byung-Chul Han”. Se refiere a Laura González-Flores, con La fotografía ha muerto, ¡viva la fotografía!, o Manuela de Barros, con Arqueología de los medios. La tecnología desde una temporalidad difusa, ambas editadas por Herder México. “De todas formas –prosigue Sandra T. Florencia–, nuestros libreros siempre conservan juntos y a la mano todos los libros de Han para no demorar en apoyar a algún lector que nos pregunte por alguno de sus libros”.
Desde Buenos Aires, Cecilia Fanti no solo nos dijo cuáles eran los títulos más vendidos, sino que comentó y analizó el porqué: “El último año, el libro que más hemos vendido es Teoría King Kong, de Virginie Despentes. Han arrasado con él. Históricamente había circulado en ediciones pirata y difíciles de conseguir. Pues bien, con el desembarco del debate feminista –y la discusión sobre la legalización del aborto–, el libro explotó. Tenemos jóvenas y no tanto leyendo, comprando, regalando y comentando Teoría King Kong».
La misma Fanti se despide, cerrando ya este reportaje, con otro de sus títulos mejor vendidos y con una anécdota: “Otro autor que vendemos muy bien es Mark Fisher, primero con Realismo capitalismo y luego con Los fantasmas de mi vida. Sobre este, muy recientemente un cliente nos contó que el mismísimo día que lo compró, le robaron la mochila con solo un pañuelo viejo y el libro. Qué combinación extraña, pero a la vez acertada, y qué desilusión trágica para el ladrón”. Bueno, igual era un ladrón ilustrado y fue a por ello con todo su conocimiento. Luego está el debate romántico sobre si robar libros es robar o es robar menos, pero eso que no se lo pregunten a un librero.
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