banalidad del mal
F+ Arendt y Zambrano: el mal y sus formas
El mal tiene sus formas de expresión que a nadie dejan indiferente. Ya sea por la repugnancia que provoca o por la irradiación de un halo trascendente, tanto de lo sobre-humano como de lo infra-humano, el mal es un misterio fascinante, atendiendo a su etimología latina, fascinare, como resultado de aquello que nos hechiza con...
F+ Hannah Arendt: pasión por pensar
Hannah Arendt (1906-1975) fue una de las pensadoras más relevantes e influyentes del siglo XX. Discípula de Karl Jaspers o Martin Heidegger, y coetánea de Edith Stein, Simone Weil o María Zambrano, siempre eludió el apelativo de «filósofa» y prefería decir que su tarea era la de escrutar la realidad como alguien que no solo...
Hannah Arendt y la libertad para pensar
La banalidad del mal. Este concepto clave para la filosofía en el siglo XX tiene dos protagonistas: Adolf Eichmann y Hannah Arendt. El primero, alto cargo durante el régimen nazi, fue capturado en 1960 por el Mosad en Buenos Aires y llevado a Jerusalén para ser sometido a juicio por crímenes cometidos durante la Segunda...
Hannah Arendt: destripando el mal
Es una de las figuras más importantes del pensamiento político del siglo XX. A la filósofa que no quería que la llamaran filósofa, la filosofía la atrapó en la adolescencia. Hannah Arendt reflexionó acerca del totalitarismo, el holocausto y las circunstancias que pueden llevar a un ser humano «normal» a cometer atrocidades, y dejó para la historia su teoría de la banalidad del mal. Ella lo sintió de cerca: era judía, huyó de Alemania y de un campo de concentración en Francia, y fue testigo del juicio contra uno de los responsables del exterminio. La vida y sus paradojas hicieron que años atrás se enamorara del que llegó a ser el «filósofo del nazismo».